El V60 es el método de los alquimistas modernos. Minimalista en forma, pero exigente en técnica, este cono japonés de vidrio o cerámica invita a una preparación lenta, consciente, casi meditativa.

Su diseño —con ángulo de 60°, estrías en espiral y un único orificio amplio— permite controlar cada variable: temperatura, molienda, flujo, tiempo. Es café como ciencia. Pero también como arte.

El resultado: una taza limpia, brillante, con notas florales, frutales o cítricas según el origen del grano. El V60 no disfraza: revela. Y por eso, enamora a quienes buscan transparencia y elegancia en cada sorbo.

Para prepararlo:

  • Usá café de molienda media, tipo arena húmeda.

  • Agua a 92–94 °C, idealmente filtrada.

  • Prehumedecé el filtro para evitar sabores a papel.

  • Verté en círculos, lentamente, respetando los tiempos de floración y extracción.

El V60 exige atención, pero recompensa con claridad. Es el método del barista que pesa cada gramo, del curioso que experimenta, del amante del café que quiere entenderlo.

¿Qué descubrís cuando el café se vuelve transparente?

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